Los laboratorios remotos, dada su potencia para la enseñanza y el aprendizaje del carácter experimental de las ciencias naturales en la educación superior, son particularmente interesantes. El Centro de Investigación y Apoyo a la Educación Científica (CIAEC) de la Facultad de Farmacia y Bioquímica estableció una alianza con el Laboratorio de Experimentación Remota de la UNED de Costa Rica para investigar e innovar en el uso de laboratorios remotos en educación superior. La iniciativa dejará sentadas bases sólidas para el desarrollo de propuestas enseñanza que incluyan el uso de laboratorios remotos incluso después de la pandemia.
La irrupción de la pandemia de covid-19 y las consecuentes medidas de distanciamiento social adoptadas por la mayoría de los gobiernos modificaron sustancialmente cientos de aspectos de la vida en sociedad. Particularmente, las prácticas educativas en contextos formales debieron adaptarse a nuevas mediaciones. Así, las instituciones debieron desplegar dispositivos de enseñanza remota de emergencia para garantizar la continuidad pedagógica. La educación superior no fue la excepción. Por primera vez en la historia, la universidad latinoamericana llevó adelante una enseñanza masiva durante una crisis sanitaria global que a mediados de 2020 encontró su epicentro en la región.
La pandemia puso de manifiesto que en muchas instituciones educativas de nivel superior se registran dificultades para afrontar los desafíos emergentes, tanto en los aspectos tecnológicos, como en la formación específica de sus docentes, requerida para la enseñanza inclusiva y de calidad mediada por las tecnologías digitales. En este sentido, muchas intuiciones redoblaron esfuerzos para apoyar a sus docentes. Prueba de esto son los seminarios del Centro de Investigación y Apoyo a la Educación Científica (CIAEC) y el Curso Nuevas Perspectivas para la Enseñanza de las Ciencias en pandemia y para la pospandemia, ambos de la Facultad de Farmacia y Bioquímica (FFyB) de la Universidad de Buenos Aires (UBA).
Las asignaturas pertenecientes al área de ciencias naturales y tecnología se vieron particularmente interpeladas por el proceso de virtualización de su enseñanza. La educación científica, de gran relevancia para comprender e intervenir sobre los problemas que presenta la realidad en la que vivimos, posee una naturaleza altamente experimental que debe ser especialmente considerada en las propuestas en educación a distancia. El trabajo en el laboratorio de ciencias constituye un contenido medular para la construcción de conocimiento en estas áreas, que no puede ser simplemente sustituido mediante un documento de texto, un video o un encuentro sincrónico en una plataforma de teleconferencia.
Los esfuerzos realizados por las instituciones educativas implicaron, entre otras cosas, la incorporación de recursos tecnológicos tendientes a facilitar el vínculo entre los docentes y sus estudiantes. No obstante, es menester seguir trabajando para resolver cuestiones clave acerca de cómo transformar los cursos virtuales en propuestas didácticas que potencien el aprendizaje pleno de los estudiantes. En particular, se vislumbra como prioritaria la incorporación de la práctica experimental en dichas propuestas es pos de completar la experiencia de aprendizaje.
Existen diversas alternativas que intentan abordar la cuestión de las prácticas experimentales en propuestas de educación a distancia o mixta. Estas incluyen el desarrollo de actividades experimentales simples, que pueden realizarse en el domicilio de los estudiantes, el trabajo en laboratorios móviles empleando algunas aplicaciones disponibles para los teléfonos inteligentes, el uso de simulaciones y la incorporación de laboratorios remotos. Estos últimos, dada su potencia para la enseñanza y el aprendizaje del carácter experimental de las ciencias naturales en la educación superior, son particularmente interesantes.
Figura 1. Laboratorio Remoto de Valoración Ácido-Base desarrollado por la Universidad Estatal a Distancia y LabsLand y utilizado en proyecto de investigación conjunta con el CIAEC.
Los laboratorios remotos son un conjunto de tecnologías hardware y software que permite a profesores y estudiantes llevar a cabo una actividad experimental de manera relativamente similar a si estuvieran en el laboratorio presencial. La diferencia radica en que la manipulación del equipamiento se realiza a distancia, pudiendo acceder desde cualquier parte del mundo en cualquier momento. Sin embargo, más allá de sus potencialidades intrínsecas, el uso de esta innovación requiere la toma de decisiones fundadas en investigación didáctica.
Investigaciones recientes dan cuenta de que los laboratorios remotos son una innovación prometedora para mejorar la enseñanza y el aprendizaje de competencias científicas en todos los niveles de la educación, debido a que la utilización de estos recursos permite accionar conocimientos prácticos en contextos reales. Más aún, son realmente potentes para el fortalecimiento de la educación de las ciencias e ingenierías en la modalidades a distancia y mixtas.
En todo el mundo hay varios desarrolladores de laboratorios remotos, como la Universidad Federal de Santa Catarina en Brasil, la Universidad Nacional de Educación a Distancia en España o la Universidad Estatal a Distancia en Costa Rica (UNED). También se encuentran plataformas como LabsLand que es una Spin-off de la WebLad-Deusto que permite, por medio de un sistema de federación de laboratorios, remotos compartir y ofrecer múltiples laboratorios de forma global.
El CIAEC estableció una alianza con el Laboratorio de Experimentación Remota de la UNED para investigar e innovar en el uso de laboratorios remotos en educación superior. Esta cooperación se traduce en la presentación de proyectos de investigación conjuntos, autorías compartidas e intercambio de experiencias. También se espera que pronto se inicie la formación cotutelada de recursos humanos.
Figura 2. Display del Laboratorio Remoto de Valoración Ácido-Base
La naturaleza del trabajo realizado en el marco de esta cooperación internacional hace posible una rápida transferencia a las aulas. Así, por ejemplo, los docentes y estudiantes de la asignatura Calidad de Medicamentos de la carrera de Farmacia de la UBA, serán pioneros, en su contexto, en la realización de un trabajo práctico remoto. La experiencia de años de trabajo de los profesores de la Cátedra, que participaron de los seminarios del CIAEC y el curso Nuevas Perspectivas, permitió una rápida adecuación de las propuestas de enseñanza para incluir el Laboratorio Remoto de Valoración Ácido-Base desarrollado en conjunto por UNED y LabsLand. En este laboratorio los estudiantes podrán realizar la valoración de tres muestras incógnitas de ácido cítrico con hidróxido de sodio como titulante. Algo que se hacía presencialmente en los laboratorios de FFyB y que concuerda con prácticas incluidas en la Farmacopea Argentina. La actividad experimental no será simulada, sino real, diferida, realizada a distancia, en cualquier momento y cuantas veces sea necesario.
Esta iniciativa que reúne la experiencia de las cátedras, el compromiso del CIAEC con el mejoramiento de la educación científica y la investigación en didáctica de las ciencias naturales y la tradición del Laboratorio de Experimentación Remota, maximizará las posibilidades de aprendizaje de los estudiantes de la FFyB y dejará sentadas bases sólidas para el desarrollo de propuestas enseñanza que incluyan el uso de laboratorios remotos incluso después de la pandemia.
Izq. a der. Carlos Arguedad Matarrita, costarricense, profesor de física, máster en Tecnología Educativa y doctor en Educación en Ciencias Experimentales de la Universidad Nacional del Litoral; profesor, investigador y coordinador del Laboratorio de Experimentación Remota de la Universidad Estatal a Distancia de Costa Rica. Ignacio Idoyaga doctor en Bioquímica y profesor adjunto de la cátedra de Física, del Centro de Investigación y Apoyo a la Educación Científica (CIAEC) de la FFyB.
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